El titular del Comité Operativo de Emergencias (COE), Francisco Aguilar, presentó la renuncia luego de la realización del acto de Alberto Fernández en Salta ante el “riesgo sanitario” que implicó la realización del desfile en homenaje a Güemes.

El encargado de la estrategia epidemiológica de Salta se quejó de la “politización” del acto y decidió dar un paso al costado luego de cuestionar que se rompiera los protocolos “por motivaciones políticas”.

Ayer, el presidente Alberto Fernández estuvo presente al encabezar el acto homenaje al general Martín Miguel de Güemes a 200 años de su muerte. Allí, una enorme columna de militantes con bombos y banderas se apareció en la ceremonia de la Guardia bajo las Estrellas.

Debido a motivaciones políticas que no comparto y desconocía, se autorizó el ingreso de simpatizantes del señor Presidente de la Nación.

Aguilar reclamó que la movilización se realizó “sin protocolo” y expresó su “preocupación por los hechos acaecidos” en el marco del acto. “No obstante debido a motivaciones políticas que no comparto y desconocía, se autorizó el ingreso de simpatizantes del señor Presidente de la Nación”, expresó.

Asimismo, señaló que esta actitud “constituyó una afrenta a los salteños y al esfuerzo que la sociedad viene realizando para combatir esta pandemia”. “Con gran tristeza, desde el COE tuvimos que restringir el desfile y la afluencia de público para rendir homenaje al General Güemes con la convicción de que una concurrencia numerosa podría afectar la hoy delicada situación sanitaria de nuestra provincia”, explicó.

El médico señaló en su carta de renuncia que se habían impuesto restricciones a los gauchos que participarían del desfile, como por ejemplo la suspensión de tradicionales fogones.

“La errática y contradictoria política sanitaria del gobierno nacional puede afectar seriamente la situación de la pandemia, por transmitir a la comunidad la sensación de que no se valoran los esfuerzos individuales y colectivos realizados en aras de proteger la salud pública”, enfatizó.

Finalmente, el ahora exfuncionario de Salta puso a disposición del gobernador Sáenz la renuncia al cargo que, según afirma, lo honró, “sin esperar ninguna contraprestación más que la satisfacción de haber seguido”.