La sopa de lasaña, una innovadora versión del clásico italiano, ha tomado por sorpresa a internet. Aunque su origen se remonta a un hotel estadounidense en los años 90, este plato se ha vuelto un fenómeno viral gracias a TikTok.
Durante más de un siglo, los estadounidenses han reinterpretado platos italianos como el fettuccine Alfredo y el pollo a la parmesana. La sopa de lasaña es la más reciente incorporación a esta lista, creada para simplificar la preparación del tradicional plato, combinando sus ingredientes en una sola sopa.
La receta ganó popularidad de manera peculiar. En 2022, una cuenta de TikTok probó cuántas hojas de lasaña crudas se necesitaban para detener un tren de juguete de Lego en una rampa (24, para los curiosos). Inspirado por esta broma, Danny Freeman, conocido como @dannylovespasta, hizo un video desde su cocina en Nueva York, usando las hojas rotas en una sopa de tomate con carne molida.
Poco después, la cantante SZA pidió la receta, y la sopa de lasaña se volvió viral, acumulando más de 21 millones de visualizaciones. Esta versión se convirtió en la base para muchas adaptaciones, incluyendo variantes vegetarianas y con pesto.
Sopa de lasaña: ¿Cuál es la historia de un plato adaptado?
La lasaña tradicional, horneada en un molde, ganó popularidad en los restaurantes ítalo-estadounidenses durante los años 30 y se introdujo como comida congelada en los 50.
La versión en sopa probablemente surgió en los 90 en el restaurante del Palmer House Hilton en Chicago, cuando los restaurantes italianos tradicionales empezaban a cerrar.
La sopa ganó fuerza cuando Campbell’s Soup Company publicó una receta que incluía caldo de carne. Además, la popularidad de las ollas eléctricas pudo haber contribuido a su éxito.
Cómo es la receta de sopa de lasaña
Ingredientes para 6 porciones:
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cebolla grande picada
- 2 cucharadas de ajo picado (aproximadamente 6 dientes)
- 220 g de carne picada
- 220 g de salchicha
- 1 cucharadita de orégano seco
- ½ cucharadita de nuez moscada molida
- ¼ cucharadita de pimienta roja triturada
- Sal y pimienta negra
- 3 cucharadas de pasta de tomate
- 6 tazas de caldo de pollo bajo en sodio
- 700 ml de salsa de tomate
- 220 g de láminas de lasaña secas, rotas en trozos de aproximadamente 2,5 cm
- 1½ taza de ricota
- ⅓ taza de queso parmesano rallado
- ¼ taza de crema de leche
- ½ taza de hojas frescas de albahaca, rasgadas, y más para servir
Preparación:
- En una olla grande, calentar el aceite de oliva a fuego medio. Agregar la cebolla y saltear hasta que esté translúcida, de 4 a 6 minutos. Añadir el ajo y cocinar por 30 segundos a 1 minuto.
- Incorporar la carne picada, la salchicha, el orégano, la nuez moscada, la pimienta roja, 1½ cucharadita de sal y ½ cucharadita de pimienta negra. Cocinar, desmenuzando la carne, hasta que comience a dorarse, entre 3 y 5 minutos. Añadir la pasta de tomate y cocinar por un minuto.
- Agregar el caldo de pollo y la salsa de tomate, llevar a ebullición. Añadir las láminas de lasaña, reducir el fuego y cocinar, sin tapar, de 15 a 20 minutos, hasta que la pasta esté tierna y el caldo ligeramente reducido.
- Mientras la sopa hierve, mezclar la ricota y el queso parmesano en un tazón. Agregar ¼ cucharadita de sal y pimienta negra al gusto.
- Fuera del fuego, incorporar la crema de leche y la albahaca a la sopa. Ajustar de sal y pimienta si es necesario.
- Servir la sopa en platos hondos, cubriendo con una generosa cantidad de la mezcla de ricota y algunas hojas de albahaca.
Este plato, que combina la comodidad de una sopa con los sabores reconfortantes de la lasaña, se ha convertido en un favorito para muchos durante los meses fríos.
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