Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, anunció una prohibición de las importaciones de petróleo ruso a su país. El gobierno estadounidense busca aumentar el rigor de las sanciones económicas sobre Moscú a partir de la invasión a Ucrania.

La nueva medida llegó después de días de debates dentro del gobierno de los Estados Unidos y con sus aliados internacionales. La discusión se centraba en la efectividad de la decisión como forma de castigo para el gobierno de Vladimir Putin contra el riesgo de generar un nuevo shock en los mercados internacionales de energía. 

Alemania se resiste a aplicar esa medida, por lo que es improbable que la Unión Europea se sume a la prohibición. 

Según informó el Financial Times, el gobierno de Boris Johnson probablemente siga el camino propuesto por el presidente Biden. Por otro lado, Alemania se resiste a aplicar esa medida, por lo que es improbable que la Unión Europea se sume a la prohibición. 

Rusia es el exportador de petróleo más importante del mundo. Hasta fines del 2021, ese país vendía alrededor de 8 millones barriles de petróleo por día al resto del mundo. Alrededor del 60% de estas exportaciones terminan en Europa, 8% en los Estados Unidos y el 20% van hacia China. El petróleo ruso representó, en el 2021, el 21% de las importaciones de gasolina estadounidenses.