Vencido el congelamiento de precios de los medicamentos, el Gobierno publicó una nueva norma que establece "precios de referencia". Desde esta semana son públicos los valores de referencia que difundió el Ministerio de Salud para 85 principios activos (drogas como el enalapril y la levotiroxina). Las prepagas y las obras sociales deberán cubrir un 70% de ese valor.
Desde este lunes, el Ministerio de Salud difundió los precios de referencia de 85 principios activos utilizados en tratamientos de patologías crónicas prevalentes. El listado se puede consultar en la web de la cartera y es el que corresponde a enero de 2022.
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Además, la resolución 27/2022, que se en el Boletín Oficial y empalma con el fin del congelamiento de los precios de los medicamentos, especifica que los precios de referencia se renovarán mensualmente. Para calcularlos, se tomará un promedio de los precios de venta al público ponderados por las cantidades demandadas de cada producto, en base a los datos del último semestre disponible.
En este sentido, este mecanismo corresponde a una forma de control indirecto de precios. Debido a que transparenta un valor promedio de los principios activos para que cada consumidor pueda elegir libremente qué marca comprar.
Cómo funciona el nuevo esquema de “precios de referencia” de medicamentos
Dentro del sistema de precios de referencia se consideran alrededor de 205 valores que incluyen a los 85 principios activos en sus diferentes “potencias” y presentaciones. Por ejemplo, el enalapril (una droga para la presión) tiene 10 precios distintos, porque depende del gramaje y de la cantidad de comprimidos.
Las financiadoras -obras sociales y prepagas- tienen que cubrir el 70% de ese valor. Los precios de referencia se actualizarán de forma mensual de acuerdo a la suba porcentual del promedio simple del índice de salarios y el índice de precios al consumidor elaborados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Como paciente, hay que exigir receta de droga y no de marca
Para utilizar esta información a favor del paciente, se deberá pedir al profesional de la salud que le haga una receta que prescriba la droga y no una marca determinada. Desde 2002 existe la Ley 26.649 de prescripción por nombre genérico, aunque no siempre se cumple.
A su vez, la Dirección Nacional de Habilitación, Fiscalización y Sanidad de Fronteras establecerá un modelo único de receta de uso obligatorio para la prescripción de medicamentos. Las indicaciones deben incluir "como contenidos mínimos: la identificación unívoca del paciente y del medicamento prescripto por nombre genérico, la fecha de confección y la de inicio de vigencia”.
Así, el paciente recibirá una receta con la droga y podrá ir a la farmacia a consultar qué opciones tiene. Su obra social o prepaga solo cubrirá el 70% del precio de referencia. Cuanto más salga la marca que elija, más deberá poner de su bolsillo para comprarla.
“Por otra parte, los subsistemas de salud, privado y de la seguridad social, nacionales o provinciales, deberán propiciar la incorporación progresiva de farmacias a fin de garantizar la disponibilidad de medicamentos a cada beneficiario y beneficiaria en establecimientos cercanos a sus respectivos lugares de residencia, sin limitaciones económicas ni financieras de ningún tipo”, explicó en un comunicado el Ministerio de Salud.
