El Gobierno prevé la apertura de fronteras y autorizar el ingreso de turistas extranjeros a partir de octubre para reactivar el turismo de forma “agresiva”. Para esto, analiza bonificar hasta un 100% unos 100.000 pasajes de avión a través de Aerolíneas Argentinas. La medida estaría destinada a los turistas que provengan de Brasil, Chile y Uruguay, siempre y cuando certifiquen una cierta cantidad de noches de estadía en nuestro país.
El lunes pasado el ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, confirmó que el Gobierno prevé poner en marcha un plan para pagarle parte del costo, o su totalidad, a los turistas extranjeros que visiten la Argentina una vez que se reabran las fronteras. “Los países tienen diferentes estímulos para intentar que lleguen más turistas a sus destinos. Uruguay, por ejemplo, devuelve el IVA. Tiene que haber estímulos materiales para que los turistas elijan un destino”, señaló en declaraciones a Radio Mitre.
“Estamos pensando en un plan donde podamos dar algún estímulo para el turismo regional. El 65% del total de los turistas extranjeros vienen de países limítrofes, especialmente Brasil, Chile y Uruguay”, agregó el ministro. La estrategia busca ser agresiva para que la Argentina pueda competir como un destino turístico atractivo entre los demás países, también con necesidad de reactivar su turismo.
Además, entre otras ideas que baraja Lammens y su equipo, está la de otorgar bonificaciones en alojamiento y gastronomía, dos de los sectores vinculados al turismo más golpeados en el último período.
Hoy las fronteras están completamente cerradas para el turismo. Por el momento únicamente pueden ingresar al país los argentinos y residentes, con un cupo diario de 1.700 personas por día. El mismo aumentará a 2.300 a partir del 23 de agosto. Sin embargo, desde el Gobierno ven con buenos ojos el avance del plan de vacunación y prevén que para el mes de octubre podrán reabrir las fronteras internacionales para el ingreso de turistas extranjeros.
Justamente octubre es el mes en el que Lammens prevé implementar el plan de estímulo. Si la variante Delta de coronavirus ya no representa una amenaza para entonces, y el país puede permitir el ingreso de extranjeros sin necesidad de hacerlos cumplir una cuarentena obligatoria, el terreno sería ideal para la implementación del plan.
