El jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta anunció que el próximo paso, tras la vacaciones de invierno, es regresar a las aulas sin burbujas. Ante esto, gremios educativos consideraron que "no están dadas las condiciones" de infraestructura para garantizar el distanciamiento necesario para evitar contagios de Covid.
“La asistencia va a ser obligatoria para todos los alumnos. Quedan exceptuados aquellos chicos que tengan alguna condición de riesgo o convivan con personas de riesgo. Ellos van a poder seguir aprendiendo a distancia”, dijo Rodríguez Larreta en su conferencia de prensa.
Por su parte, la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña, confirmó que el retorno a la presencialidad será con burbujas que abarcarán "al curso completo" -ya no divididos en subgrupos- explicó que el objetivo de la medida será "recuperar horas de clases" y sostuvo que la meta es "lograr la normalidad en forma paulatina y cuidada”.
La secretaria general de UTE-Ctera, Angélica Graciano, expresó su rechazo y preocupación al analizar que "lo más grave de la medida anunciada es que afirman que no habrá distanciamiento", y que "las escuelas, las aulas y los baños no están en condiciones para la vuelta a presencialidad total".
"Larreta y (Soledad) Acuña (ministra de Educación porteña) anuncian que será para que todos los chicos y chicas asistan a las aulas y que será todos los días, pero no sabemos cómo estará la situación epidemiológica en 15 días", sostuvo Graciano en declaraciones formuladas esta mañana a El Destape Radio.
Asimismo agregó que, además, las aulas "no están en condiciones para albergar 35 chicos y chicas" al mismo tiempo, sin ponerlos en riesgo frente al contagio de coronavirus.
“La infraestructura escolar ya es un problema crónico con Larreta. Baja el presupuesto un punto por año", alertó Graciano.
La secretaria general del gremio recordó asimismo que “los índices de presentismo fueron muy bajos en el primer cuatrimestre" y repudió la decisión del Gobierno porteño de poner ausente a los alumnos que no asistan a clases y dijo: “La educación no se trabaja mediante amenazas".
Paula Galigniana, secretaria de Comunicación de UTE-Ctera, se hizo eco de las opiniones de Graciano, y cuestionó a Rodríguez Larreta por hacer "anuncios mediáticos sorpresivos". En ese sentido, remarcó la contradicción que existe en el Gobierno porteño, que “abre escuelas, pero a la vez baja 70% de presupuesto en infraestructura para poder arreglarlas”.
De acuerdo a lo informado, desde UTE-Ctera se evaluará la semana próxima las condiciones epidemiológicas para tomar una decisión con respecto a la vuelta a la presencialidad.
Por su parte, el secretario adjunto del gremio docente Ademys, Jorge Adaro, calificó de “irresponsable y criminal” la vuelta a la presencialidad total a las escuelas porteñas y afirmó que la medida “reafirma que la prioridad" del Gobierno de Rodríguez Larreta es "la comunicación en perspectiva electoral".
“Denunciamos la falta de calefacción, de alimentos, problemas de infraestructura. La medida es una nueva provocación y marca que el Gobierno de la Ciudad se sigue burlando de la gente", sostuvo Adaro en declaraciones a la radio FM La Patriada.
"Parece que la pandemia se terminó en la Ciudad" señaló Adaro y dijo que "si pretenden que se vuelva como en marzo 2020, no habrá el distanciamiento necesario". "Los mismos protocolos que establecieron los están haciendo pedazos", subrayó.
El dirigente gremial anticipó que la entidad sindical que encabeza realizará un paro el 2 de agosto, porque los anuncios de las autoridades porteñas no hacen más que "reafirmar y reforzar" el rechazo de los trabajadores de la educación ante el retorno de la totalidad de los alumnos y alumnas en el presente contexto sanitario.
