Frente a la suba en la cantidad de casos de coronavirus que se registraron durante las últimas dos semanas, desde el gobierno insistieron con la importancia de cumplir con los protocolos de higiene, el uso de tapabocas y la ventilación de los ambientes. Pero, ¿cuáles son las claves para disminuir el contagio en espacios cerrados?

Distintos estudios han demostrado que los espacios mal ventilados son los lugares de mayor peligro, generalmente por la inhalación de partículas en el aire que contienen coronavirus. En exteriores, en cambio, estas se diluyen rápidamente y prácticamente no queda aire que haya sido respirado por otra persona, con lo cual el riesgo de contagio disminuye considerablemente.

Por esta razón, la ventilación constante en los ambientes es clave en la prevención del Covid-19. La misma debe ser cruzada para que el aire circule, es decir, debe generarse un flujo de aire permanente, sin que se acumulen aerosoles. Este recurso es más efectivo que una apertura intermitente.

Por este motivo, es aconsejable utilizar ventiladores que incrementen la velocidad de intercambio del aire entre el interior y el exterior, evitando el flujo de aire directo entre las personas.

Como muestra una infografía de El País, por ejemplo, al entrar en un auto en el que haya otra persona con las ventanillas cerradas, la medición de dióxido de carbono se dispara a niveles preocupantes. Pero si abrimos las ventanillas apenas unos centímetros y generamos ventilación cruzada, el aire entra en permanente renovación.

5. Al entrar en un coche en el que haya otra persona con las ventanillas cerradas, la medición de CO₂ se dispara a niveles preocupantes. Pero, al abrir las ventanillas apenas unos dedos y generar ventilación cruzada, el aire entra en permanente renovación https://t.co/IqvOTwxO0q pic.twitter.com/UNOQL5e932

— EL PAÍS América (@elpais_america) March 28, 2021

De no haber ventilación, en solo 10 minutos el 8 por ciento del aire que respiramos ya ha sido respirado. Si una de las personas estuviera contagiada de Covid-19, el riesgo de contagio sería del 30 por ciento durante los primeros 10 minutos y 71 por ciento en una hora. En cambio, si se abren las ventanillas 5 centímetros, el aire se puede renovar hasta 9 veces por minuto. Es decir que únicamente la ventilación constante de los espacios cerrados mantiene bajo el riesgo de contagio, ya sea natural o mecánica.

No obstante, esta medición no distingue entre la utilización o no del tapabocas. Por este motivo, los niveles de referencia deberían ser más estrictos aún en los espacios en los que no se esté utilizando el barbijo.